La exposición que se puede ver en Madrid, y en la que participan pintores de Ubrique y Arcos, tiene como objetivo recaudar dinero para las acciones humanitarias que lleva a cabo Mensajeros de la Paz por todo el mundo. Sus ayudas se extienden en más de 50 países y reconocen que todas las aportaciones no son suficientes para paliar el sufrimiento de muchos que, en la mayoría de los casos, se hallan en el umbral de la pobreza.

Hoy a través de un comunicado, han querido agradecerle a la Fundación López Mariscal, la donación económica que realizó su Presidente José Luis López Fernández y con la que, según Paula Lemos, Directora de Desarrollo Global de Mensajeros de la Paz,  “hemos podido sacar adelante, en Madrid, distintos proyectos que buscan fundamentalmente acompañar a personas en situación de extrema vulnerabilidad social, pues muchas de ellas en situación de calle. Dichos proyectos los llevamos a cabo desde la Iglesia de San Antón, con Desayunos diarios y la “despensa de San Antón” y con el Restaurante Robin Hood. 

Paula insiste en que “gracias al apoyo de la Fundación López Mariscal, sus colaboradores y su presidente José Luis López Fernández, desde Mensajeros de la Paz se pudo ayudar a más de 550 personas. Con la donación recibida, pudimos garantizar durante el mes de enero alimentos y ropa de abrigo (por ejemplo: mantas, guantes, bufandas, calcetines) para más de 550 de personas que se encontraban en situación de exclusión social, la mayoría sin techo (teniendo que dormir muchas veces en la calle, aún con nieve). Este apoyo resultó de gran relevancia ya que, durante la nevada, muchos comedores sociales se cerraron y las calles estaban prácticamente intransitables”

Por eso, toda la ayuda que puedan recibir es poca. Además, hoy hace una semana que el padre Ángel recibió la placa de manos de Miguel Santana, director  de Santana Arte Gallery, en homenaje y reconocimiento a su gran labor a favor de los más necesitados. Para el director de la Galería de Arte, el Presidente de la Asociación Mensajeros de la Paz es todo un ejemplo de persona humanitaria y expresó el honor que sentía al poder hacerle entrega de esa placa. 

Protagonistas también en ese momento los cuadros donados por artistas de toda España y entre los que figuran, como se puede apreciar en la foto, detrás del padre Ángel, la aportación de los pintores ubriqueños y de la comarca, quienes deben saber que la solidaridad siempre tiene una buena causa y, por supuesto, nuestro reconocimiento y agradecimiento.