Él es un maestro de un arte, que a pesar de haber entrado en decadencia en la industria de la marroquinería, sigue muy vivo y presente en el mundo artístico. Luis Domínguez Rojas está ligado al oficio del repujado desde hace más de 70 años.

Él es uno de los grandes repujadores de la marroquinería local, un oficio que por los caprichos del mercado está en vía de extinción. Sin embargo el artista local lo ha mantenido gracias a su tesón con el martillo y el cincel, herramientas con las que da forma a magníficas obras de arte que podemos admirar en su propio taller-museo.

Son muchas las personas que se acercan al pintor para conocer de primera mano la técnica y sus producciones. Y, con la generosidad y la grandeza que lo caracterizan, ha atendido al alumnado del Programa ADVANCE. Durante toda una mañana, les ha explicado pacientemente la forma de proceder con la piel, para conseguir cuadros de una calidad artística de lo que atesora en su refugio. Y acto seguido, los jóvenes, inspirados por sus palabras, han intentado imitarlo siguiendo las indicaciones del maestro.

Finalmente los resultados han recibido la aprobación del experto repujador. Así que gracias por esta lección y por enseñarnos el camino hacia la creación de un arte donde la creatividad no lo es todo, pues también la paciencia debe ser uno de los dones del auténtico repujador.