Desde esta primera semana de noviembre el alumnado de las clases de apoyo de la Fundación cuenta con una mascarilla con filtro FFP2 donada por la entidad

Desde finales del mes de octubre, la Junta de Andalucía amplió el uso de la mascarilla, ahora es obligatorio incluso para la práctica deportiva al aire libre y en los establecimientos de hostelería y restauración mientras no se esté consumiendo. 

El uso continuado de esta prenda es la mejor forma de evitar los contagios que, al parecer, en este mes de noviembre están alcanzando cotas muy elevadas. Sin embargo, la adquisición de estas supone un coste más para algunas familias que ya se están viendo económicamente afectadas por el coronavirus. Así que la Fundación ha querido contribuir, en la medida de lo posible, a sufragar parte de los nuevos gastos que esta pandemia está provocando en los núcleos familiares. 

El alumnado del Programa ADVANCE ha mostrado su gratitud por este gesto de la Fundación, al igual que sus familiares, quienes están muy agradecidos no solo por ayudar a sus hijos en el estudio diario con las clases de apoyo, sino que además ahora con una mascarilla totalmente homologada y con una gran protección.